El destino de este perrito era morir de dolor, pero un héroe luchó hasta salvar su vida

Todos deberíamos poder recibir el año nuevo de buena manera, pero no era eso lo que le estaba ocurriendo a este adorable perrito. Por ser el último día del año las clínicas veterinarias se encontraban cerradas y no había nadie quien pudiera atender su terrible dolor causado por un prolapso rectal con 63,5 centímetros colgando de él, el dolor era insoportable. Y hubiese sido así por mucho más tiempo de no ser por Elli Frank.

Frank recibió la imagen de este perrito que se encontraba en terrible sufrimiento mientras el pasaba el último día del año sentado apaciblemente en casa, definitivamente eso no era justo, por lo que decidió hacer algo.

Incluso después de que le habían dicho que no podía aceptar más animales por esa noche, no se dio por vencido, se dirigió al centro de cuidado animal en lugar de ir a su casa y habló con la consejera de admisiones quien fue muy amable.

Luego de algunas explicaciones pudieron atender a este adorable animalito que tiene entre 10 y 12 meses de edad en el refugio de Harlem dirigido por los Centros de Cuidado Animal de la Ciudad de Nueva York (ACC, por sus siglas en inglés).

El perro no podía ser llevado inmediatamente a casa luego se su tratamiento, pero Frank dejó su número de teléfono a la consejera de admisiones diciéndole: «Escucha, sé que piensas que estoy loco, pero no tengo nada más que hacer hoy, así que llámame».

Apenas a cinco minutos de haber llegado a su casa en Brooklyn, el teléfono de Frank sonó, le llamaban para que fueran a buscar al perro que ya se encontraba mucho mejor. Este perro era ahora el primer rescate del año de su organización «Mr. Bones and Co.»

A pesar del severo dolor que este perro había sufrido, se mostraba tan feliz y resistente que decidieron llamarlo «Tater Tot», lo que significa patata. «Parece un bebé hipopótamo», comentaba Frank, «está unido como si un niño estuviera armando un rompecabezas y no pudiera conseguir que las piezas encajaran, pero aún así la imagen parecía perfecta tal como era».

Todo el equipo se puso de acuerdo muy rápido para ayudar a pagar los gastos de este perrito, algo que nunca antes se había visto.

«Qué increíble manera de empezar el año», decía Frank. «Tiene el cuerpo de un bulldog inglés, la cabeza de un pit bull, con las mismas características de un pit bull, y los ojos de un bulldog francés, es algo mágico.»

TheDodo

Ahora este pequeño rompecabezas llamado Tater Tot está buscando su pieza final: un hogar.

Puedes seguir la recuperación de este adorable perrito en su página de Facebook, y puedes ayudar con donaciones a la organización para que puedan seguir rescatando a más animales como él.

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