Hay historias de amor tan conmovedoras que simplemente te dejan sin palabras, y esta es una de ellas, se trata de una pitbull callejera encontrada al lado de una carretera en el sur de Dallas, Estados Unidos, cuidando un gatito huérfano de pocos días de nacido.
Un técnico veterinario los descubrió, pensó que esta perrita estaría amamantando a un cachorro pero al aproximarse se sorprendió al darse cuenta que estaba protegiendo a un indefenso gatito. A la vista no se veía ningún otro animal así que llevó a ambos a la clínica “Mercy Animal”, en Garland, Texas, aparentemente los dos estaban sanos, el gatito no habría sobrevivido sin esta protección maternal que recibió.
El Dr. Rick Hamlin admitió estar impresionado, “En mi carrera de más de 28 años, nunca había visto algo así, que un pitbull y un gatito se hayan encontrado el uno al otro y estén conectados de esta forma es algo realmente increíble”. Los llamaron Pittie y Kitty.
El destino los unió en un momento de gran sufrimiento y necesidad por su historia de abandono, sin saber lo que pudo haber ocurrido y dadas las circunstancias en las que fueron encontrados, se presume que Pittie tuvo una camada que perdió por alguna razón desconocida y todavía tenía algo de leche, entonces vio a este gatito que recién había nacido y estaba desprotegido, ella lo consideró como su hijo, comentó Rick.
Definitivamente Pittie decidió seguir siendo una madre para este bebé. Hizo todo lo posible por mantenerlo con vida, si no hubiese estado allí la historia sería muy distinta.
Ella es muy dulce y ama a su gatito mostrando un inconfundible instinto maternal, su leche se estaba secando, así que inmediatamente comenzaron a alimentarlo con fórmula. En la primera noche, Kitty se fue a casa con el Dr. Rick para su alimentación con biberón. Pittie no estaba muy feliz. Esperaba ansiosamente cada mañana para ver a su bebé adoptado y darle mucho amor.
El personal ha decidido mantenerlos en el mismo espacio, ya que esta devota madre aúlla cuando los separan. Se han vuelto prácticamente inseparables, esperan encontrarles un hogar que los adopte a ambos, “Han pasado por mucho juntos, y ya no podemos separarlos”, agregó Rick.
Pero sucedió algo que nadie esperaría y causaría mucha tristeza, lamentablemente la salud de Kitty empezó a deteriorarse, se alimentaba cada vez menos y falleció a pesar de los esfuerzos. Se determinó que tenía una malformación congénita de la vejiga y los riñones.
Cuesta creer que se haya ido. El Dr. Rick dijo que en el corto tiempo de vida de Kitty “sus días fueron un flujo constante de amor y compasión, fue bendecida al haber sido adoptada por Pittie, rescatada por buenos samaritanos y haber recibido todos los cuidados en el centro médico, fuimos bendecidos por haber sido capaces de cuidar de ella y recibir su amor”.
Pittie, ha tenido que lidiar con este dolor. Pero la vida le ofrece una nueva oportunidad para encontrar fortaleza y consuelo al encontrar un hogar amoroso para siempre, ahora tiene hermanos y una familia maravillosa que la cuida.
Pittie performs the morning cleanup.
Publiée par Mercy Animal Clinic sur Mercredi 25 mars 2015
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