Una fotógrafa quiso mostrarle al mundo el sufrimiento que padecen los animales en cautiverio

El Centro Internacional de Fotografía y Cine ofrece anualmente la beca EFTI para estudiantes, y en esta ocasión el tercer lugar se lo ha llevado una fotógrafa de Ecuador que merece la pena ser mencionada aquí.

María Gabriela Portaluppi fotografió animales de la vida salvaje, que tristemente terminan en cautiverio o inclusive muertos a causa de los caprichos del ser humano. Hizo una profunda reflexión acerca del gusto y el amor por los seres vivos, y lo que ese amor egoísta puede llevarnos a hacer.

Verlos, alimentarlos y hacerles cariños no es amarlos, permitirles tener la libertad en la que nacieron sí lo es. Es muy hermosa la historia, porque ella pasó por un proceso de reconocimiento ante esa realidad. Compartimos con ustedes sus palabras y por supuesto las impactantes fotografías.

«Un día me preguntaron por qué me gustaban tanto los zoológicos y los acuarios, siendo yo una amadora de los animales.»

«Muchas de las personas que me preguntaban eso, tenían razón, coincido con ellos, es la manera más triste de verlos».

«Empecé a reflexionar sobre esto e intenté buscar una respuesta visitándolos más a menudo usando la fotografía»

«…y como respuesta vi que me sentía cada vez más atraída a estos sitios»

«Al momento de seleccionar las imágenes comencé a darme cuenta de que mi fascinación venía por los lugares en los que ellos se encontraban…»

«…y cómo el ser humano se esfuerza para crear un mundo falso»

«Sólo para que exista una idea de cómo sería su verdadero entorno.»

«Pero no lo es, tendemos a asumirlo y a olvidar que ellos no pertenecen ahí»

EFTI

Efectivamente, María Gabriela tiene razón. El humano se esfuerza por crear un ambiente que imita el hábitat del animal y lo obliga a vivir allí, en la mentira. ¿Para qué? Si su hábitat ya existe, y ellos son felices en él.

Comparte estas maravillosas imágenes y profunda reflexión con tus amigos. ¡Bravo, María Gabriela!

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