Abandonada gravemente herida apenas pudo asomar la cabecita afuera de la caja para pedir ayuda

Lamentablemente, son muchos los perritos abandonados que llevan una vida de miseria y dolor, no solo por todo lo que deben tolerar en las calles sino porque cargan consigo las cicatrices de un pasado donde nunca conocieron un gesto de amor.

Por suerte, existen organizaciones que día a día velan para rescatar y ayudar a la mayor cantidad de peludos sin hogar que sea posible.

El grupo de rescate es de Cartagena, Colombia.

Manejo de Fauna Callejera es una de esas organizaciones que velan por el bienestar de los perritos más vulnerables, ellos fueron quienes rescataron a una peludita que estaba completamente débil y muy enferma.

Sus antiguos dueños la abandonaron en un basurero como si se tratara de cualquier desecho.

La perrita estaba dentro de una caja de cartón.

Su estado de salud era tan crítico que la pobre cachorra no podía moverse, es posible que haya estado en esa caja varios días, eran tan pequeña que sólo se le podía ver su cabecita.

Encerrada y sin fuerzas para salir a pedir ayuda se deterioró tanto que estaba al borde de la muerte. Los rescatistas no dudaron en responder a la llamada anónima para ayudar a la indefensa perrita que más tarde llamaron Carbonella.

Tenía la piel reseca y llena de ácaros.

No pasó mucho tiempo para que se dieran cuenta del estado crítico en que se encontraba Carbonella, no solo tenía un grave cuadro de desnutrición sino que su pequeño cuerpo estaba cubierto de heridas abiertas que le ocasionaban gran dolor.

Como si fuera poco, también tenía sarna severa lo que hizo que perdiera gran parte de su pelaje.

La perrita también presentaba lo que se conoce como el síndrome de la piel escaldada.

Su situación era muy delicada, pero ahora estaba en buenas manos. Sus rescatistas se convirtieron en ángeles y la acompañaron en el largo proceso de recuperación.

Para el personal de la clínica veterinaria que la estaba atendiendo lo más difícil fue sanar su piel, gran parte de ella estaba costrosa, además tenía un infección por estafilococos, una enfermedad que invade directamente los tejidos y causa infecciones en la piel

Su increíble transformación agita nuestro corazón de alegría.

Carbonella tuvo que someterse a múltiples pruebas, el tratamiento fue largo pero logró salir victoriosa. Si bien tuvo un pasado cruel, su presente está lleno del más puro amor.

A pesar de todo el dolor en que se vio inmersa es un perrita amable y juguetona con todas las personas que la rodean.

Ahora disfruta dormir en su camita limpia y jugar con otros perritos.

Su recuperación la pasó en el centro de rescate local, finalmente logró ser adoptada y ahora disfruta de las comodidades de un verdadero hogar donde es extremadamente feliz.

Comparte esta historia y no dudes en adoptar y cambiarle la vida a un perrito. Ellos sólo te responderán con mucho más amor del que reciben.

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