Después de una noche de tragos un hombre se despierta con el «beso» de un oso salvaje

Después de una ajetreada jornada y tal vez un brindis con amigos no es raro quedarse profundamente dormido, y lo menos que deseamos es despertar sobresaltados. Pero a un pescador en Rusia le pasó todo lo contrario, casi muere del susto cuando abre los ojos y ve lo que tiene cerca.

Ilya Nikolsky es una turista que estaba con su madre y una amiga disfrutando de la belleza de la playa de Khalaktyr, en Kamchatka, Rusia. En un momento en que se encontraban tomando el té cerca de la costa, se percató de que algo estaba ocurriendo en la distancia.

Al principio creyó que se trataba de un perro grande, pero cuando afinó su vista se dio cuenta de que era un curioso cachorro de oso que olfateaba a dos pescadores, que estaban durmiendo plácidamente sobre la hierba verde en el suelo, sin advertir de lo que ocurría a su alrededor.

Despierta «bello durmiente»

El pequeño oso comenzó a caminar cerca de los dos hombres y le pisó el pie a uno de ellos, así fue como se dio cuenta de la presencia del animal. Se levantó asustado de un solo salto, mirando al objeto de su temor; no podría creer el peligro que corrió mientras dormía profundamente.

«Comenzamos a gritarle a los pescadores que despertaran, pero las olas del océano no permitían que ellos escucharan nada», dijo Nikolsky a un medio de la zona.

De inmediato, entre gritos, el asustado hombre despertó al amigo que también pegó un brinco a ver al oso tan cerca de ellos. Mientras tanto Nikolsky siguió grabando el terrorífico momento, que posteriormente compartió en las redes sociales y de inmediato se viralizó.

El repentino movimiento del pescador hizo que el cachorro de oso se alejara del lugar. Por su comportamiento el animal no parecía nada tímido, se mantuvo imperturbable por unos segundos hasta que decidió alejarse corriendo, y después caminó con paso más lento.

¡Qué genio! Yo solo quería jugar

«Estamos impactados por lo que está sucediendo, esto es terrible, pudo haberlos matado», dijo un consternado internauta.

No es para menos, la península de Kamchatka tiene alrededor de 24.000 ejemplares y el año pasado dos personas murieron por ataques de osos. Por fortuna, este no era tan grande, tal vez se alejó de su madre. Nikolsky paseó su mirada por los alrededores en busca de la posible progenitora sin resultado.

«Teníamos miedo de que el oso viniera por los pescadores, pero afortunadamente el oso era pequeño».

Al final del video, la cámara se aleja para mostrar al oso que va en retirada mientras tanto los confiados y dormilones hombres se mantienen aún de pie, tratando de pasar el sobresalto. Seguramente lo pensarán dos veces antes de volver a tomar dormir bajo las estrellas.

Y por si acaso, la próxima vez que vayas a tomar una siesta procura que no sea al aire libre, no sabemos cuándo viene un visitante inesperado y nos da un gran susto. Comparte esta historia de osos con todos tus amigos.

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