Cuando un ser querido parte de este mundo deja un vacío muy grande en los corazones de quienes lo amaron, no importa si se trata de una persona o una mascota, lo cierto es que es muy difícil que la vida sea la misma.
Chris Sontag-Ratti, residente del Área de la Bahía, vivió la terrible experiencia de despedirse para siempre de su amada mascota “Todo”, una mezcla de Boxer-Rottweiler de 12 años, que lamentablemente falleció de cáncer en enero del 2013.
Ciertamente el nombre de este perrito “Todo” era un tanto particular, y aunque fue escogido al azar expresamente perfectamente lo que representó este amable perrito en la vida de su dueño.
Chris decidió conmemorar su memoria obsequiando pelotas de tenis a los propietarios de otros perritos.
La idea de Chirs para recordar a su “Todo” era enviar gratis pelotas de tenis como un regalo a cualquier persona que tuviera un perrito en casa y que las usara para jugar con ellos, y así ayudar a otras mascotas y a sus dueños a compartir de más tiempo juntos y disfrutar de esos momentos que, tristemente para él y “Todo” no volverán.
«Algunas personas tienen la religión y otras se aferran a sus cosas materialistas, pero para mí era mi perro».
Chris afligido por la partida de “Todo” y buscando una manera de rendir honor a quien le dio tanto amor y lealtad compró 100 pelotas de tenis y publicó la idea en su cuenta de Instagram.
Realmente quería crear consciencia de lo importante que es valorar y disfrutar el tiempo que los dueños y sus mascotas pasan juntos.
Aunque Chirs dijo que esperaba poca reacción por parte de los usuarios, fue sorprendido con los más de 8.000 «me gusta» que recibió en 24 horas acompañados de muchas solicitudes de pelotas de tenis.
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«Me siento muy bien al respecto. No se trataba solo de “Todo” y de mí. Se trataba de influir a las otras personas para que interactúen más con sus mascotas. Tal vez un perro que este en el patio con una cadena, con suerte, lo sueltan y le lancen una pelota o algo así «.
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Para un ser humano la libertad no tiene precio, y compartir con sus amigos y familiares tampoco, para los perros no es diferente. Jugar con nuestros amigos peludos es una manera de hacer que ellos vivan y se sientan libres y amados.
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Chris decidió adoptar a un perrito y llevarlo a casa como un integrante más de la familia. Es cierto que el lugar de “Todo” nadie lo ocupará, pero este gran hombre tiene mucho amor para darle a Scooby, el residente con más tiempo en el refugio ante de que fuera adoptado.
Un cachorro que fue rescatado de una triste vida de peleas de perros.
Chris lo ha cuidado con amor y lo ha ayudado a superar su terrible experiencia y juntos están haciendo el mundo un poco mejor.
Comparte esta maravillosa historia, nunca olvidemos la enseñanza que nos deja hoy una pelota de tenis en relación con el valor del tiempo compartido con tu amigo peludo… ¡Celebra su vida jugando con él!