Muchas de nuestras mamás nos dicen en forma de reto la típica frase: “Y si tus amigos se lanzan de un puente, ¿tú también lo harías?”. Lo hacen tratando de buscar conciencia propia e individual en cada uno de nosotros porque somos los responsables de cada paso que damos y debemos ser independientes.
¿Pero qué sucede cuando es tu mamá la que se lanza del puente? Esto genera una reacción en cadena repleta de ternura y diversión. Los pequeños patitos siguen a su mamá a todas partes, como es costumbre, y eso significa que es a todas partes, sin excepción alguna.
El paseo de este día comprendía ir al parque y lo que venía después era una gran sorpresa, la mamá los dirigía al puente para darse un buen chapuzón. La mamá pata cruzó el puente, llegó al borde de los tablones de madera, extendió sus alas y saltó al estanque sin problema alguno y dejó a sus patitos sobre el puente; ellos se mostraban totalmente desconcertados, no sabían qué hacer y tampoco qué había hecho su mamá, lucían un poco asustados.
Al ver que su mamá se encontraba bien y a flote en el estanque, uno de los trece patitos tomó coraje y se lanzó; después de él, todos sus hermanos se unieron en el salto y uno tras otro llegaban a reencontrarse con su mamá sobre el agua para disfrutar juntos del brillante sol. Simplemente adorables.
Sin duda, fueron muy valientes en darse ese chapuzón, recordemos que los patitos nacen con el instinto de nado, así que la idea de la mamá pata no era tan descabellada, sólo quería enseñarles a sus pequeños un poco de valentía, habilidades y confianza en sus acciones. Ya los pequeños no le temerán a la altura y tampoco al agua.
Relayhero / Countrymusicnation
Todo el video es bastante tierno y repetirlo te enamora más, es muy lindo escuchar a las personas presentes de los trece saltos profesionales que dieron esos pequeños patitos, todo fue aplausos y risas, todos estaban contentos con los resultados. Saltos espléndidos.
Una familia hermosa y bastante grande de patos, una belleza. Nos sentimos muy orgullosos de todos esos bebés por saltar tan valientemente al agua sin temer a la profundidad del estanque, lo hicieron muy bien.
Ya son unos nadadores expertos y esperamos que sigan aprendiendo de su madre de la misma manera, que no hay desafíos grandes y que cualquier puede ser superado con seguridad y valentía.
¡Comparte esta noticia de ejemplo familiar con tus amigos!