Llevan a un perrito al veterinario porque llora atemorizado cada noche y se niega a dormir

Cuando alguien adopta un perrito, de algún modo también se está vinculando con su historia. A veces es bueno saber todo lo que vivió en su pasado, para así entender mejor las cosas que marcaron a un animalito y convertirse en el compañero ideal para él.

Una familia decidió adoptar a un perro. Era un pastor alemán muy dulce y le pusieron por nombre Ollie. La pareja estaba muy feliz de llevar a casa a un perro amoroso que creciera junto a sus hijos.

A simple vista, Ollie parecía ser la mascota perfecta para esta familia

Todo parecía estar bastante bien con Ollie, hasta que llegó la primera noche. Los padres adoptivos del perro notaron que él, en lugar de ir a dormir a la cama que le habían proporcionado, se quedaba junto a su cama, muy atento a lo que hicieran.

Al principio pensaron que se trataba de un proceso normal. A fin de cuentas, el perro debía acostumbrarse a su nueva familia y eso no es algo que ocurre de un día para otro.

Ellos fueron pacientes, porque lo amaban y sabían que Ollie era ya un miembro más de la familia.

En este vídeo puedes conocer mejor la historia del pobre Ollie

Las noches de insomnio de Ollie continuaron. El perro, casi como un ritual, se echaba cerca de la cama de sus amos cada día, sin perder de vista sus movimientos durante la madrugada.

A veces era capaz de permanecer sentado e incluso, emitía suaves chillidos, como si algo le doliera e incomodara.

Preocupados, los padres de Ollie decidieron llevarlo al veterinario. Una revisión médica les indicó que todo estaba bastante bien con el animal. Era un pastor alemán joven y lleno de vida.

El especialista no supo a qué atribuir exactamente la conducta del perro, salvo a una situación de estrés por su nuevo hogar.

Su estado de salud estaba bastante bien, así que no sabían a qué atribuir su insomnio

Las noches de insomnio de Ollie continuaron, así que sus amos decidieron acudir al refugio, ¡pero no para devolverlo! Querían saber un poco más de su pasado, si es que era posible, para poder entender realmente el misterio que había detrás de su singular actitud.

Algunas veces los mismos refugios no saben por lo que han pasado las mascotas, pero con el caso de Ollie tenían una pista que encajaba bastante bien con su extraña actitud.

Los encargados del albergue de mascotas le explicaron a la nueva familia del perro en qué condiciones había llegado el animal a sus instalaciones.

Su antiguo dueño lo sacó de casa una noche, en medio de la madrugada. Trasladó al perro hasta el refugio, donde le abandonó sin mirar atrás. Esto explicaría que Ollie ya no pueda dormir como cualquier otro perro normal.

Al parecer, Ollie sí tiene un caso de estrés. El perro quizás cree que durante la noche es vulnerable a vivir una situación semejante y perder de nuevo a su familia.

Los padres de este amoroso animal esperan convencerlo, con el paso del tiempo, que llegó a este nuevo hogar para quedarse. Intentan ofrecerle consuelo para que sienta que puede conciliar el sueño, que puede confiar en ellos.

El perrito debe volver a confiar en los humanos

perrito

El comportamiento de este perrito que teme dormir y no puede conciliar el sueño, se debe a los traumas asociados por los tratos injustos que recibió.

Sufrió tanto cuando lo sacaron de su casa durante la noche que ahora siente miedo y angustia cuando llega la hora de descansar porque teme volver a vivir tan traumática experiencia.

Ningún perrito merece sufrir así, a pesar de todo, nos alegra saber que Ollie está en manos de una familia que lo ama sin condiciones y está dispuesta a ayudarlo a dejar atrás las heridas del pasado.

Esta historia es una muestra de la enorme sensibilidad que caracteriza a las mascotas. Y que podemos dejar en ellos heridas incurables, mucho más profundas de lo que imaginamos.

Más noticias sobre:

Te recomendamos