Si de pesadillas se trata, una de las más recurrentes es que un monstruo viva debajo de nuestra cama. Pero, ¿qué pasaría si lo llevamos al siguiente nivel y pensamos en que un monstruo pueda vivir debajo de nuestra casa? Nuestro templo de descanso, de pronto se torna el lugar más inseguro y oculta a nuestra peor pesadilla. Pues, una chica en Tailandia nos puede explicar, qué se siente descubrir que un peligroso animal se oculta en el suelo de tu casa.
Ella se llama Uraiwan Seksuk, vive en Samut Songkram, tiene 43 años y se encontraba colgando la ropa recién lavada en el patio de su casa.
Uraiwan sintió una vibración muy extraña en sus pies, le pareció curioso y comenzó a mirar con detenimiento el suelo de cemento. Su sorpresa fue que en el borde de la placa se podía ver como sobresalía lo que parecía ser el final de la cola de una serpiente.
Sin dudarlo corrió a llamar a las autoridades de la zona para que la ayudaran.
La policía llegó a su casa, confirmaron que había una serpiente debajo de su casa y la situación se tornó más tensa cuando se dieron cuenta que no podían sacarla de un tirón. Comenzaron a romper el cemento y a más de uno se le aceleró el corazón al ver que se trataba de una gigantesca Pitón de Birmania.
Estas son las serpientes constructoras más grandes del mundo, incluso más grandes que las anacondas.
Cuando lograron romper el cemento y sacarla se mostró agresiva y estresada, además tenía un abultamiento que indicaba que había comido hace poco. La pitón medía más de cinco metros y su peso era mayor a 20 kilos, fueron necesarios cinco oficiales para cumplir con el objetivo.
Con cuidado la trasladaron hasta la parte posterior de una camioneta para poder llevarla de regreso a su hábitat natural.
Pero la historia de terror aún no llegaba a su fin. Este tipo de serpientes demoran entre 5 y 8 días en digerir a su presa. Sin embargo, si se sienten amenazadas en ese periodo vomitan, así pueden moverse y huir con mayor facilidad.
Eso fue exactamente lo que hizo esta gigantesca y estresada pitón.
Mientras se encontraba en la cabina de la camioneta, comenzó a expulsar su comida que resultó ser un enorme lagarto monitor de 1,5 metros. Era horrible mirar toda la escena, es como combinar los peores temores en uno solo.
“Sabía que en la parte trasera de la casa había vida salvaje pero nunca imaginé que vivieron animales tan enormes, espero que no regresen”, dijo Uraiwan.
YouTube / TheSun
A pesar del estrés vivido, la serpiente resultó ilesa en todo este confuso momento y pudo ser llevada nuevamente a la naturaleza, lamentablemente el lagarto murió en vano. Esperamos que historias como estas no se repitan, ya que pueden ser muy aterradoras tanto para las personas como para los animales. Sabemos que Uraiwan pronto superará el temor de que la serpiente vuelva y se sentirá nuevamente segura en su hogar.
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