Por negligencia o porque las mascotas envejecen, hay familias que de verdad creen que es muy fácil cerrar para siempre los ojos de un perro o un gato. Emu fue el protagonista de una historia muy cruel, asociada con esta actitud.
Un perro llamado Emu vivió una vida muy dura. El perro callejero fue dejado en el veterinario para ser sacrificado, pero el médico se encargó de él y tomó una decisión muy diferente: en lugar de eso, llevaría a Emu al Día de Adopción de Sidewalk Specials.
Así entregó la familia de Emu a un veterinario para que dispusiera de su vida
Aquí es donde todo estaba a punto de cambiar para Emu. Encontró una familia de acogida para vivir y fue llevado a Vet Point para un chequeo y comenzar el proceso de recuperación.
Como es de imaginarse, el perro estaba nervioso al principio, pero cuando se dio cuenta de que todos estaban allí para ayudar, comenzó a salir de su caparazón. Emu fue muy amable y dulce a pesar de su duro pasado.
Su triste mirada y su condición no le impidieron hallar a las personas correctas
Solo quería que una familia permanente lo amara, pero para un perro mayor, ser adoptado es una posibilidad bastante remota. Emu tampoco estaba en la mejor forma, pero su familia adoptiva no se rendiría.
Todo parecía indicar que Emu no tendría sencilla la tarea de acceder a un mejor porvenir, pero la última palabra no estaba dicha y sin lugar a dudas, los involucrados en su bienestar, lucharían por ello.
Emu fue dejado en una clínica veterinaria con la expresa instrucción de que fuera dormido
El evento del Día de Adopción de Sidewalks Specials ya había llegado y el padre adoptivo de Emu no estaba seguro de si encontraría a su familia para siempre.
Sin embargo, ¡no perdió la esperanza y el milagro sucedió! La familia adoptiva del perro decidió sentarse con él todo el día y hacerlo sentir seguro y amado.
¡Ahora Emu es un perrito completamente nuevo! ¡Y es evidente!
En un nuevo hogar con una nueva familia, Emu ahora tiene un nuevo nombre: ¡Nutzie! Después de dos meses, Nutzie se instaló con su nuevo hermano, Sahara. Los dos son completamente inseparables, y esta vida es lo que siempre había soñado.
¡Cada perro merece una segunda oportunidad, y estamos muy felices de ver que Nutzie tiene la suya! Pasó de ser un sucio perro callejero para convertirse en la querida mascota de una familia, ¡su transformación es increíble!
No solo tiene a personas que lo aman, también cuenta con un compañero de cuatro patas que es un gran hermano.
Después de ver la mirada tan triste de este perrito es gratificante conocer cómo se transformó tras recibir el amor y la protección que tanto merecía. Comparte este rescate.