Un conductor intenta salvar a una débil perrita electrocutada en las vías del tren

El futuro de un animal doméstico en las calles casi siempre es la muerte segura. Como hemos dicho en cientos de ocasiones desde esta tribuna –y no nos cansaremos de hacerlo–, somos fieles creyentes de que las cosas se cambian actuando y no solo sintiendo lástima por los animales en estado de calle, tenemos que ser agentes de cambio.

Pero, así como muchas mascotas sucumben ante la indolencia del hombre, otras, por fortuna, escapan milagrosamente a su destino mortal y obtienen una segunda oportunidad de vida.

Tal es el caso de una perrita de raza chow chow que logró salvarse por un pelo de morir calcinada por electrocución, tras un trágico accidente ocurrido en una vieja estación ferroviaria ubicada en la mítica ciudad de Liverpool, Inglaterra, en las vísperas del fin de año.

“El animal tenía un fuerte olor a quemado y estaba sangrando por la boca, además de sufrir una lesión en su pata (…) Es milagroso que siga viva”, dijo la persona que rescató a esta chow chow, cerca de la mencionada estación de trenes.

La pequeña fue encontrada por uno de los choferes yaciendo aterrada en las vías, cerca de la estación Liverpool Central. Al percatarse del animal, sin pensarlo dos veces, el hombre la tomó en sus brazos y la puso a salvo.

No obstante, al mirarla más de cerca el conductor también pudo notar que tenía algunas quemaduras en buena parte de su denso pelaje. Todo parecía indicar que la peludita cayó por accidente en los rieles y se electrocutó.

“El animal estaba sangrando, además de que, por la lesión en su pata no podía apoyarse”, aseguró Vicki McDonald, inspectora de la organización animalista RSPCA.

Además, McDonald detalló que, por el pelaje tan grueso y propio de su raza, al momento del rescate no se sabía a ciencia cierta si tenía más lesiones a nivel cutáneo. Sin embargo, las quemaduras habían sido muy fuertes.

La pobre perrita estaba muy asustada y se notaba que había sufrido mucho durante el tiempo que estuvo atrapada.

En lo sucesivo, se hará lo imposible por cumplir con la misión de reunirla de nuevo con su familia, ya que al momento de ser encontrada llevaba un arnés puesto. No se le encontró adherido algún microchip en su cuerpo. Según McDonald, esto pudo deberse al shock eléctrico que habría afectado el funcionamiento del dispositivo.

Actualmente, la dulce perrita se encuentra recibiendo los cuidados médicos pertinentes en una veterinaria, donde se le brinda mucho amor y cariño. Como mencionamos antes, para RSPCA la prioridad es reunir al animal con sus dueños, que deben estar muy angustiados de no saber de su paradero.

Por fortuna, su historia tuvo un final feliz, gracias a la pronta acción de este buen hombre que la recogió, pero también de los especialistas, quienes continúan empeñados en lograr que la peluda recobre el calor y el afecto de su hogar, y devolverla con los suyos.

Como todos sabemos, un perro, sin importar su raza dará el mismo amor, compañía y protección que busca y requiere de nosotros los humanos. No importa si es cachorro, adulto, peludo, grande o pequeño, igual sabrá agradecer siempre el cuidado y el amor incondicional que les ofrezcamos. 

Comparte esta historia que nos recuerda que todos merecen una oportunidad con tus seres queridos.

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