Alguien decidió tenderle la mano a esta gatita miserable, pero ella no venía sola

Un gato persa había estado merodeando los alrededores de un vecindario en Canadá, pero nadie se había preguntado quién podría ser su dueño o dónde estaría su hogar.

Pasó el tiempo y cuando un residente lo encontró en muy mal estado entre los arbustos, le tomó una foto y decidió pedir ayuda.

Con esta foto, el hombre que descubrió a la gatita, decidió pedir la ayuda de expertos

Isabelle, una compañera de trabajo del hombre que había descubierto al gato, vio sus fotos y supo que necesitaba ser rescatado de inmediato. Fue entonces cuando se dirigió al encuentro del minino con la ayuda necesaria.

Cuando se aproximaron al gato, de inmediato se ocultó debajo de un auto. Su estado era lamentable.

La gatita estaba en condiciones lamentables

Sus ojos estaban irritados y su mirada era triste, su pelo estaba completamente sucio y enmarañado y sentía mucho temor de las personas. Isabelle supo que tenía que armarse de paciencia.

Media hora más tarde, el gato se había dejado atrapar por Isabelle, quien lo llevó de inmediato al veterinario. Lo primero que hicieron allí fue deshacerse de todo ese pelo inmundo que la cubría y ella parecía estar feliz de recibir todas esas atenciones.

La lenta pero feliz recuperación de Rose Penélope está en este video

Fue bautizada como Rose Penélope y se dieron cuenta de que tenía varios problemas, especialmente con su vista y con sus vías respiratorias. Además, no pasaron por alto de que aunque estaba bastante flaca, su pancita lucía abultada. Pronto iba a ser madre.

Le tomó muy poco tiempo tornarse una gatita feliz y agradecida. Stephanie, una voluntaria de acogida decidió hacerse cargo de Rose Penélope y comenzó a prepararlo todo para darle la bienvenida a sus gatitos.

Un buen corte de pelo fue el inicio para su recuperación

Por fortuna para esta gatita, sus pequeños no nacerían en las calles. Ella estaba mucho mejor de sus problemas de salud, por lo que estaba lo suficientemente fuerte y recuperada para cuidar de sus chiquillos con amor y entrega total.

Fue entonces cuando algunas semanas más tarde las 2 pequeñas crías de Rose Penélope llegaron.

Rose Penélope estaba feliz de recibir ayuda

Ellos pudieron amamantar felices y ella tenía el bienestar y la tranquilidad necesarias para amarlos en todo momento. Demostró ser una madre excepcional y estar completamente llena de agradecimiento hacia las personas que la había ayudado.

Al salvar a Rose, no solo le dieron una segunda oportunidad a esta gatita, también lo hicieron con sus crías, quienes están seguros, sanos y felices, todos en espera de un hogar y un futuro mejores.

Ella se dedicó a cuidar de sus gatitos con amor y abnegación

Si amas las historias como la de Rose Penélope, ¿por qué no compartirla? De seguro muchos lo apreciarán.

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