Carmelite, la chihuahua que llega a pesar 22 kilos tras ser alimentada con comida de Mc Donalds

La obesidad es un problema de salud que puede acarrear complicaciones graves con el tiempo, desde dificultad respiratoria hasta dolores en las articulaciones, sin contar una serie de problemas dentro del organismo y problemas de autoestima que empeoran todo. Afecta a millones de personas en el mundo, pero los humanos no somos los únicos que sufrimos de este sobrepeso.

En varias ocasiones hemos visto animales como perros y gatos que pueden llegar a pesar mucho más de lo debido.

El sobrepeso puede ser producto de problemas hormonales, pero también puede deberse a una mala alimentación. No se trata solo de comer mucho, sino del tipo de alimentos que ingerimos: los azúcares, los carbohidratos y la llamada “comida rápida”, pueden ser un factor desencadenante para el sobrepeso.

Así le ocurrió a esta pobre chihuahua llamada Carmelite, cuyos primeros dueños aseguraban que no le gustaba la comida para perros.

Eileen Cutter es una amante de los animales, que había adoptado perros en otras ocasiones y cuando fue en busca de uno nuevo a North Shore Animal League, se encontró con una Carmelite que pesaba más de 22 kilogramos. Ella habló con su esposo y decidieron adoptarla para ayudarla.

Carmelite había sido alimentada durante un año con comida rápida, lo que le causó obesidad, pero Eileen cambiaría su vida desde 2016.

Carmelite comenzó una estricta dieta de comida para perros y una rutina de ejercicios que comenzó a devolverle su salud. Al principio, ella no quería caminar más de dos casas, se cansaba y era muy perezosa, pero poco a poco ella fue agarrando el ritmo de su rutina de ejercicios y se volvió mucho más activa.

Ella tiene 4 hermanos más, que vivían con Eileen y ahora es la más juguetona y enérgica de todos, se levanta desde muy temprano y siempre quiere ir a correr o a pasear. Ella fue perdiendo peso gradualmente y sus nuevos padres demostraron que sí era capaz de comer comida para perros.

Ahora ella pesa sólo 5 kilogramos y está mucho más contenta.

LittleThings / RachaelRayShow

Carmelita es un ejemplo del daño que le podemos hacer a nuestras mascotas por no cuidar de su alimentación, su peso poco a poco afectaría su sistema esquelético y algunos órganos.

Afortunadamente, el camino le puso a buenas personas frente a ella, que le hicieron la vida mucho más agradable; ella también es el ejemplo de que con disciplina y constancia todo se puede, pues Eileen asegura que no hizo nada especial fuera de su estricta alimentación y ejercicio. Ahora a Carmelite y a sus hermanos les permiten cada cierto tiempo comer un poco de crema batida como premio.

Comparte la increíble historia de Carmelite, un aplauso a Eileen que logró llevarla nuevamente a su peso ideal.

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