Granjero agarra por la nuca a un enorme lince para regañarlo por comerse sus gallinas

Para un granjero, estar al frente de un negocio de avicultura, como en cualquier otro emprendimiento, tiene sus riesgos inherentes.

Cuando se crían pollos y gallinas para la venta de sus productos derivados, por ejemplo, una de las principales amenazas la constituyen otros animales depredadores.

Un granjero siempre se excederá en cuidados, desvelos y amor por las criaturas que le dan de comer

granjero

Chris Paulson es uno de estos operarios de una granja ubicada en Tuffnut, Columbia Británica, Estados Unidos.

Con una conciencia ambientalista muy manifiesta, comentó que «nunca imaginó que tendría que enfrentarse cara a cara contra un enorme lince de 11 kilos de peso».

El poderoso depredador había logrado entrar al corral donde se encontraban las indefensas gallinas, pollos y demás crías, para darse un atracón con unos cuantos de estos suculentos ejemplares.

El amor por sus gallinas le hizo reaccionar al granjero de la manera más temeraria e insospechada

Aunque Chris se encontraba temeroso de una posible reacción agresiva por parte del animal, sorprendentemente, éste se mostró bastante tranquilo y dócil.

Ese comportamiento poco usual del enorme felino le permitió al hombre tomarlo por el cuello, darle un buen regaño y una lección para que deje de hurtar en el futuro las cosas ajenas.

Al respecto, el granjero relató:

«El lince tenía plumas en la boca, no quería irse sin un pollo. Traté de sacarlo de allí, pero estaba concentrado en su presa. De modo que me agaché y lo levanté como lo hace un gato doméstico con su gatito».

Por muy depredador que fuera el lince, el granjero jamás permitiría que le arrebatara lo que cuidó con tanto esmero

La «seria» charla que el hombre tuvo con el animal salvaje, «amigo de lo ajeno», enfrentándolo a su abuso de tamaño, versó en los siguientes términos:

«Mira el caos que causaste, amigo… Mira lo mucho que las asustaste».

Sin embargo, pese a la reprimenda, Paulson es un hombre considerado, quien conoce de naturaleza y sabe que la depredación es la condición instintiva de estas criaturas.

Una vez controlado el felino, el hombre se compadeció del animal quien se veía realmente muy delgado.

Así que reflexionó mejor y decidió dejarlo ir con su gallina, para que pudiera alimentarse. Sabe que siempre habrá otros cazadores al acecho, pero, también que todos son seres indefensos que hay que cuidar y, en ningún caso agredir.

Todas las vidas sin distinción merecen ser respetadas por igual

Sobre todo, cuando se trata de granjas, pues se trata de animales que residen en espacios abiertos, el lugar perfecto para zorros y otras especies de animales depredadores hambrientos.

“Por suerte, logré atraparlo y, aunque muchos pensarían que estos animales son agresivos, en esta ocasión, no lo fue conmigo”, afirmó Chris.

Todo pudo haber acabado muy mal pero el lince tuvo un comportamiento fuera de lo usual

Según la estimación de Paulson, este gato tenía la corpulencia suficiente para haberlo herido gravemente.

Sin embargo, estaba más preocupado por educar al animal en cuanto a no robar a los demás, que en su propia seguridad.

Según asegura el amante de los animales, tomándolos por la nuca es como las madres enseñan a sus cachorros a comportarse, cuando estos se vuelven demasiado revoltosos y rebeldes.

El granjero decidió asumir el papel de madre del lince para darle la lección de su vida. Míralo por ti mismo en este vídeo:

No es la primera vez que Paulson y su familia se enfrentan a un peligroso con cuatro patas como este, hambriento por sus gallinas.

Hace algunas semanas atrás, la esposa de Chris tuvo que enfrentarse a un emplumado búho, quien también atacó a dos pollos.

La naturaleza jamás deja de sorprendernos

Esperamos que estas pobres emplumadas no tengan que enfrentarse a más depredadores. Pero, lo cierto es que, aunque sus responsables se esfuercen, es imposible evitar que otros animales salvajes pasen por alto la cadena alimenticia.

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