Esta bulldog no se frena al divertido reto de pasar un hueso extra grande por su pequeña puerta

¡Este vídeo es la cura para un mal día! El desafío para el humano es intentar no sonreír viendo este encantador animalito. Y los perros son compañeros con los que hemos formado un vínculo que persiste en el tiempo desde el momento de nuestra coexistencia.

Los bulldogs ingleses son adorables, por la expresión tierna de su rostro arrugado, la forma particular de sus movimientos y su naturalidad, son pura alegría, nos hacen reír con las cosas más simples que hacen.

Russet es una perrita bulldog inglés que le gusta dormir la siesta, destruir muebles y comer delicias. Como cualquier cachorro, además de amar a sus dueños obtienen placeres que se ganan por su buen comportamiento y Russet ha sido una buena chica.

Está feliz de recibir su regalo de navidad, emocionada decide llevarlo a su pequeña casa para disfrutarlo, pero la vida está llena de desafíos y tiene problemas para enfrentar uno que se le presenta cuando llega a la puerta con el hueso extra grande que le regalaron.

Se hizo evidente que su regalo no cabe, intentó de todo. Sin embargo, ¡es tenaz y no va a rendirse!

Intenta desesperadamente pero no cabe, y no puede entender cómo solucionarlo, hasta llega a mirar a su humano como diciéndole: tengo un problemita, puedes ayudar. Encontrando en el  rostro de su dueño una expresión de incontenible sonrisa.

Russet no sabe cómo, pero está determinada a lograrlo, con o sin ayuda.

Intenta repetidamente pasar el hueso extra grande a través de la pequeña puerta para perros con poco éxito.

Al principio, ella trata de hacerlo de la manera en que lo hace habitualmente pero eso no va a funcionar. El hueso es demasiado grande, por eso con su pensamiento creativo para no abandonar el esfuerzo, trata de descubrirlo de una manera distinta, ahora que esta del otro lado, sigue insistiendo y tampoco funciona.

Pero la persistencia es la clave y merece un aplauso, después de varios intentos pudo conseguir superar con éxito el desafío.

¡Bien pensado, cariño! ¡Finalmente descubriste cómo atravesar la puerta con ese hueso! ¿Ves? Ser persistente ha valido la pena, ¡Gran trabajo!

Para nosotros también es un ejemplo divertido de cómo no debemos rendirnos tan fácilmente cuando algo no resulta, bien vale la pena hacer todo lo posible para descubrir la solución. Por supuesto, es mejor con una buena dosis de buen humor. Piensa en Russet y tal vez al final tengas la misma suerte.

Lo he visto varias veces y es realmente encantador para quien ama a estos animales y más aún si lo único que necesitas es una carcajada.

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