La historia de apuestas ilegales en lo que va del año nos llega desde Pakistán y es tan particular como hilarante. Resulta que la policía local hizo el arresto forzoso de un burro (sí, leyeron bien, un burro) junto a ocho personas por su participación en un escándalo de apuestas.
La periodista Naila Inayat publicó un vídeo sobre el incidente, y una agencia de noticias paquistaní fue la encargada de relatar cómo sucedieron los hechos. En la extraña historia podemos observar al animal atado afuera de una estación de policía mientras, presumiblemente, esperaba para ser interrogado.
El incidente ha generado las risas de miles de espectadores, pero lo cierto es que el pobre jamelgo fue acusado de estar involucrado en una carrera de apuestas, dentro de los predios de la ciudad de Rahim Yar Khan, en la provincia de Punjab, Pakistán, durante el fin de semana pasado.
La policía local decidió interrogar a los ocho sujetos, quienes cometieron el delito de apuesta pública, mismo que es penado con prisión por las leyes del país asiático.
“Dijeron que estaban haciendo apuestas en una carrera de burros, pero, además el animal representa un peligro para los transeúntes, por lo que decidimos llevárnoslo también a la comisaría”, dijo uno de los agentes del orden.
Sin embargo, cuando los oficiales fueron a arrestarlos, también lograron recuperar 120 mil rupias de Pakistán (aproximadamente unas 571 libras esterlinas) que, según ellos, estaban siendo utilizadas para apostar en la carrera de burros.
El pobre animal era víctima de la negligencia de quienes solo se preocupaban por ganar dinero y complacer sus vicios. Es lamentable que haya sido acusado en lugar de ser rescatado y trasladado a un lugar en que sí velaran por sus derechos.
“Los nueve, incluido el burro, fueron arrestados sobre la base de la ‘ordenanza de prevención del juego’ en la provincia de Punjab. Ahora, deberán pagar una multa”, añadió el comandante de policía.
El burrito arrestado por contribuir a las apuestas ilícitas está visiblemente desnutrido 
La sanción por apostar en lugares públicos en Pakistán puede variar, desde las 500 rupias (5 euros) hasta un máximo de un año en la cárcel o, en algunos casos se otorgan ambas, tanto la multa como el confinamiento en prisión. Si se comete la falta en lugares privados, la pena puede ser aún mayor.
En este caso, los acusados se enfrentan a una multa monetaria de hasta 1.000 rupias paquistaníes (10 euros), así como a una pena de hasta dos años de prisión, sin embargo, aún no se confirma si el inocente burro correrá con la misma suerte.
El grupo de jugadores ilegales fue sorprendido en flagrancia e identificados en un primer informe, no obstante, ninguno de ellos puede ser publicado hasta que se concluyan las investigaciones del curioso suceso que ha acaparado la atención de las redes sociales y ha dado mucho de qué hablar últimamente entre los usuarios.
En el mundo del póquer son habituales las noticias de arrestos a personas por juego clandestino; más hoy en día con las prohibiciones a causa de la pandemia, pero lo que resulta muy extraño es que entre los detenidos de una redada se encuentre… ¡un burro! Seguramente, si no es la primera vez que sucede, no es algo muy frecuente de ver.
Imagínense que un día están muy tranquilos con su burro y de repente llega la policía a arrestar a su bello animal sin ningún motivo aparente. ¡Una locura!
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