Rescatan un conejo en una caja al borde de la carretera aferrado a un osito de peluche

Seguramente en algún momento de tu vida encontraste paz y seguridad en un pequeño oso de peluche que te brindó compañía y evitó que te sintieras solo. Si bien estos adorables juguetes son los favoritos de los niños, nuestras mascotas también ven en ellos un amigo incondicional. Recientemente, Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals (RSPCA) recibió una llamada sobre un conejo abandonado en una caja a un costado de la carretera.

Los conejos domésticos no saben camuflarse de los depredadores.

Para sorpresa de los rescatistas, el conejo no estaba solo, el indefenso animal estaba aferrado a un oso de peluche tan fuerte como si de ello dependiera su vida.

Los rescatistas de la RSPCA estaban abrumados con la triste escena, no comprendían cómo alguien pudo dejar a un indefenso animal aguantando frío donde su mayor consuelo era un oso de peluche. Por suerte, alguien se percató la extraña caja y decidió brindarle un poco de ayuda llamando a las autoridades correspondientes.

Los rescatistas decidieron llamar al conejo Nigel.

El tierno y esponjoso conejo recibió toda la atención médica necesaria, afortunadamente no tenía ningún tipo de lesiones, solo debieron controlar su temperatura corporal. Tanto el conejo como su preciado oso de peluche fueron trasladados a la RSPCA de Inglaterra y Gales.

El tierno conejo no pierde ni un segundo de su vista a su amigo incondicional, aquel peluche que lo protegió durante las horas más difíciles de su vida. Ambos están cómodamente en las instalaciones del refugio mientras esperan potenciales adoptantes que quieran llevárselos a casa.

Su tamaño y complexión es menos fuerte que las de los conejos silvestres.

La RSCPA afirma que cerca de 1.5 millones de conejos viven como mascotas en el Reino Unido. Lamentablemente, miles de conejos domésticos son arrogados a la calle cada año obligándolos a vivir a su suerte en un entorno en el que no están preparados.

Se trata de razas domésticas que a diferencia de los conejos silvestres, genéticamente no están preparados para enfrentar la realidad de la naturaleza, al ser criados en cautividad no tienen el aprendizaje necesario para la supervivencia.

Su pelaje es largo y se enreda con facilidad por lo que necesita cepillado constante.

Si usted ya no puede cuidar a una mascota por favor comuníquese al refugio local y actúe de la mejor manera, abandonarlos a la intemperie solo puede agrandar el problema.

Los  rescatistas instan a las personas a cuidar de su mascota, en caso de abandonarlos es necesario que lo hagan de manera responsable para evitarles el mayor daño posible. Afortunadamente, Nigel fue rescatado a tiempo y tiene toda la atención que merece.

Por favor comparte esta nota en tus redes y recuerda que abandonar una mascota nunca es la solución, ellos merecen respeto y un hogar lleno de amor.

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